ESTUDIO SOBRE LA ACCIÓN CLIMÁTICA EN LOS MUSEOS
Diseño | Texto especializado por Diana Macho Morales y Cristina Martínez Salazar · 17.05.2022
El presente texto forma parte de la colaboración entre el V Coloquio de Diseño Sustentable y Farolito. Dicha colaboración pretende difundir el conocimiento que se generó a lo largo de los cuatro días de ponencias en el evento, para así contribuir a la filosofía de acceso abierto, inmediato, sin requerimientos de registro, suscripción o pago a material digital educativo, académico, científico o de cualquier otro tipo.
A través de su sitio web, Farolito pretende disponer a las generaciones futuras un acervo bibliográfico digital que contribuya al combate de los problemas de desigualdad causados por la restricción del acceso a la investigación académica para acceder a numerosas revistas, así como los desafíos económicos y la insostenibilidad percibida de las publicaciones especializadas.
Agradecemos profundamente la contribución de la Mtra. Cristina Martínez y la Dra. Diana Macho, por su artículo titulado: “ESTUDIO SOBRE LA ACCIÓN CLIMÁTICA EN LOS MUSEOS”. También invitamos a nuestra audiencia a consultar su ponencia en el Facebook oficial del Coloquio de Diseño Sustentable e Innovación Social o a través de las redes sociales de Farolito.
Este texto tiene como propósito presentar el Estudio sobre la acción climática en los museos que estamos realizando en conjunto con Heurística Estudio[1]. La inquietud sobre esta problemática surgió a partir de la reflexión sobre nuestras propias experiencias como especialistas de museos, identificando que, al igual que otros espacios, estos ocupan una gran cantidad de recursos materiales para llevar a cabo sus actividades.
En ese sentido, nos interesó conocer las acciones que implementan estas instituciones para contribuir en la sensibilización de sus comunidades con respecto a la crisis climática; así como, los criterios que orientan las labores cotidianas para el aprovechamiento de los recursos materiales que emplean.
Las instituciones culturales y en particular los museos, entendidos como espacios de construcción de sentido, memoria y reflexión no han estado ajenos a esta y otras problemáticas que nos aquejan en el mundo[2]. En diciembre de 2013 se inauguró el Museo del Cambio Climático Jockey Club en Japón, primer museo dedicado a la crisis ambiental donde muestran, por medio de exposiciones interactivas y multimedia, como se ha dado el calentamiento global y sus efectos en el planeta. Años después, en 2017 se creó el Museo del Clima de Beniarrés en Alicante, España. Meses más tarde, en 2018, el Museo del Cambio Climático en el Reino Unido, y en 2019 la Casa del Clima en la ciudad de Oslo en Noruega. Estos son solo algunos ejemplos.
Por otro lado, desde la Museología, a través del Consejo Internacional de Museos ICOM, se ha reflexionado sobre la pertinencia de redefinir el concepto de museo acorde con la realidad actual.
En 2007 el ICOM consideró como museo una institución sin fines de lucro, permanente, al servicio de la sociedad y de su desarrollo, abierta al público, que adquiere, conserva, investiga, comunica y expone el patrimonio material e inmaterial de la humanidad y su medio ambiente con fines de educación, estudio y recreo[3]. Posteriormente, en 2019 durante la asamblea anual celebrada en Kioto Japón se propuso reformular esta definición, aún vigente, considerando ciertos aspectos, entre ellos:
- Reconocer la urgencia de la crisis de la naturaleza y la obligación de desarrollar y aplicar soluciones sostenibles.
- Reconocer y admitir con respeto y consideración las muy diferentes visiones del mundo, así como las condiciones y tradiciones relacionadas con el trabajo de los museos de cualquier país.
- Admitir y reconocer con preocupación los legados y la constante presencia de profundas desigualdades sociales y asimetrías en la distribución de poder y de la riqueza a nivel mundial, nacional, regional y local.
- Expresar la unidad de la función de los museos en relación con sus comunidades.
- Expresar el compromiso de los museos como lugares de reunión, plataformas abiertas y diversas de aprendizaje e intercambio[4].
Estos aspectos coinciden con los Objetivos de Desarrollo Sostenible ODS señalados en la Agenda 2030, los cuales fueron aprobados por la Organización de las Naciones Unidas ONU en 2015 y son considerados esenciales en la década presente 2020 – 2030 para revertir los efectos sociales, culturales y ambientales que se presentarían si no se toman las medidas necesarias desde ahora[5].
Acorde con lo planteado en la Agenda 2030, entendemos como desarrollo sostenible, aquel que es capaz de satisfacer las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades. Y para ello, es fundamental vincular el crecimiento económico, la inclusión social y la protección del medio ambiente.
Los ODS son: 1. Fin de la pobreza; 2. Hambre cero; 3. Salud y bienestar; 4. Educación de calidad; 5. Igualdad de género; 6. Agua limpia y saneamiento; 7. Energía asequible y no contaminante; 8. Trabajo decente y crecimiento económico; 9. Industria, innovación e infraestructuras; 10. Reducción de las desigualdades; 11. Ciudades y comunidades sostenibles; 12. Producción y consumo responsables; 13. Acción por el clima; 14. Vida submarina; 15. Vida de ecosistemas terrestres; 16. Paz, justicia e instituciones sólidas; y 17. Alianzas para lograr los objetivos. Nuestra investigación Estudio sobre la acción climática en los museos toma como eje principal el objetivo 12, que refiere a la Producción y consumo responsables y el objetivo 13 Acción por el clima[6].
El objetivo 12. Producción y consumo responsables aborda la importancia de un consumo mucho más responsable, entendiendo al planeta como un espacio con recursos limitados que deben ser cuidados, pues su sobreexplotación representaría un riesgo inminente para la vida humana. En ese sentido, establece:
- De aquí a 2030, reducir considerablemente la generación de desechos mediante actividades de prevención, reducción, reciclado y reutilización.
- Alentar a las empresas, en especial las grandes empresas y las empresas transnacionales, a que adopten prácticas sostenibles e incorporen información sobre la sostenibilidad en su ciclo de presentación de informes.
- Promover prácticas de adquisición pública que sean sostenibles, de conformidad con las políticas y prioridades nacionales.
- De aquí a 2030, asegurar que las personas de todo el mundo tengan la información y los conocimientos pertinentes para el desarrollo sostenible y los estilos de vida en armonía con la naturaleza[7].
El objetivo 13 Acción por el clima refiere al calentamiento global, el cual es ocasionado por las altas concentraciones de CO2 y de otros gases de efecto invernadero en la atmósfera. Esto provoca el aumento en el nivel del mar y afecta a las economías nacionales, en particular a la agricultura, poniendo en riesgo la producción de los principales cultivos que integran la dieta de la población mundial: maíz, trigo y arroz. Todo ello determinando la existencia de la humanidad.
Dado que el CO2 y su presencia en la atmósfera se debe a la quema de combustibles fósiles: carbón, petróleo y gas para generar energía, este objetivo plantea la utilización de energías alternas o disminuir el empleo de aquellas que generan CO2 y otros gases:
- Cambios en la producción y consumo: reducir el uso del transporte privado o aprovecharlo al máximo, compartiéndolo; practicar movilidad sostenible; uso del transporte público, bicicleta o caminar; aumentar la eficiencia energética; consumir energía renovable: paneles solares; consumir alimentos producidos localmente, y sin envase o envase sencillo; adoptar hábitos de consumo sostenible: reducir el consumo de productos, reutilizarlos y reciclarlos; y plantar árboles ya que retienen el CO2, entre otros.
- Políticas, estrategias y planes nacionales para la mitigación del cambio climático.
- Mejorar la educación y sensibilización respecto a la mitigación del cambio climático[8].
Considerando las formas de trabajo en los museos, la emergencia climática, las reflexiones desde el ICOM y los planteamientos de la Agenda 2030, nos cuestionamos si las instituciones museísticas que atiendan esta problemática deben ser espacios especializados o bien, se tendrían que implementar acciones transversales en todos los museos.
La investigación que realizamos pretende identificar las acciones que los museos llevan a cabo con respecto al cuidado del medio ambiente, en busca de contribuir a mitigar el cambio climático. Nos interesa principalmente dos aspectos, el primero alude a las acciones que se realizan para la divulgación de esta problemática dentro de su oferta al público, es decir, si generan actividades que propicien la sensibilización entre los visitantes; y el segundo, a las acciones que llevan a cabo desde las áreas operativas dentro de sus actividades y diseño, con el fin de disminuir el desperdicio y el desecho de recursos materiales.
Para recopilar está información hemos optado por técnicas de investigación cualitativas: entrevistas a profundidad dirigidas y observación en algunos museos de la Ciudad de México y entidades aledañas.
En ese sentido, nuestro objetivo principal ha sido recuperar la experiencia de trabajadores de museos que sean especialistas en las distintas áreas: directores, administradores, museógrafos, diseñadores, gestores, investigadores y restauradores; con la intención de construir una muestra representativa en términos cualitativos, que dé cuenta de las dinámicas en cada una de las áreas que constituyen estas instituciones.
En un primer momento, la selección de museos y sus trabajadores corresponde a la Ciudad de México, Estado de México, Puebla y Morelos. Las entrevistas se han realizado a distancia por medio de la plataforma Meet entre febrero y abril de 2022.
Los temas abordados en las entrevistas son:
- Interés por la Agenda 2030.
- Infraestructura en los centros de trabajo enfocada en el ahorro de recursos.
- Prácticas limpias y diseños responsables con respecto a la producción y consumo sostenibles dentro de las áreas de trabajo.
- Aportes expositivos y museológicos para contribuir en la acción climática.
A la par de la obtención de los datos, hemos realizado la revisión bibliográfica y hemerográfica sobre algunos proyectos en museos que han atendido las preocupaciones en relación con la crisis climática.
Algunos hallazgos que ha arrojado el estudio hasta este momento[9]:
Líneas de acción institucional
No se ha identificado una política institucional que otorgue pautas de trabajo enfocadas en el cambio climático. Tampoco documentos oficiales, publicaciones o recursos que exhorten de manera formal a las instituciones culturales y sus trabajadores, a generar estrategias y soluciones para un ahorro sistemático de recursos o a una recuperación de materiales de manera permanente.
Las acciones de aprovechamiento, recuperación y buenas prácticas sostenibles dentro de los museos son resultado de inquietudes individuales del personal involucrado, pero no son permanentes, ni generalizadas.
Los proyectos que se han integrado a la oferta museológica que incluyen perspectivas climáticas, tales como: investigaciones, instalaciones, obra artística, actividades y talleres, han sido ejercicios motivados por instancias externas (comunidades artísticas, asociaciones no gubernamentales, grupos o comunidades aledañas).
No se han identificado evaluaciones o estudios de público enfocados en conocer la postura de los visitantes respecto al cambio climático y sus efectos.
No hay una sensibilización generalizada dentro de los equipos de trabajo sobre la perspectiva climática.
Ejercicios expositivos
Curaduría
Existen exposiciones que han integrado una perspectiva climática en sus discursos, combinando disciplinas históricas o antropológicas. Sin embargo, son ejercicios aislados que no responden a la existencia de una política permanente dentro de su oferta cultural que remita a la emergencia climática. Los trabajos se han enfocado en los esfuerzos de algunos pueblos por conservar su entorno natural o en la importancia de la preservación de algunas especies en peligro de extinción.
En los museos dedicados al arte, estos proyectos se han desarrollado por artistas (desde su interés particular), los que han funcionado como un detonante para la reflexión climática. La oferta que prevalece en la mayoría de los museos con esta tipología se ha enfocado en proyectos que abordan otras problemáticas y territorios de discusión social.
Los espacios dedicados a la divulgación científica y a la historia natural en nuestro país, integran dentro de sus exposiciones permanentes secciones dedicadas a la divulgación del cambio climático, el agua, el reciclaje, entre otros. Esto, responde principalmente a que comparten temas de estudio.
Museográficos
La reducción presupuestal que ha experimentado en los últimos años el sector cultural, se ha convertido en un factor determinante para integrar en los museos prácticas museográficas más eficientes. Está situación, sin duda, ha favorecido e impactado de manera positiva en la reducción de la huella de carbono. Algunos creativos y trabajadores buscan integrar soluciones de diseño, materiales y metodologías que permiten ampliar el tiempo de vida útil de sus elementos museográficos (mamparas exentas, vitrinas de tamaños estratégicos, bases y soportes modulares), pero estos ejercicios no se replican de manera sistemática, ni generalizada.
Debido a la reducción de los presupuestos se han implementado de manera informal, procesos de reciclaje y reutilización de elementos plásticos, aglomerados y vítreos. Incluso algunos museógrafos utilizan la recuperación, el trueque, el préstamo y el intercambio con otros espacios, como una forma de solucionar sus proyectos expositivos y labores sustantivas.
Los museos con mayor presupuesto han reemplazando sus sistemas de iluminación por leds, principalmente por motivos de conservación preventiva en las salas de exhibición, solución que representa un importante ahorro en el gasto energético.
El criterio de la crisis climática no ha sido hasta el momento un factor determinante en la toma de decisiones sobre las soluciones museográficas.
Infraestructura
Existen pocos museos en México con infraestructura que permita el ahorro de recursos, generación o captación dentro de sus instalaciones.
En las labores de adaptación de los inmuebles no siempre se integran criterios relacionados al ahorro de recursos naturales, materiales o energéticos.
No existe una preocupación sustantiva para integrar infraestructura que permita el ahorro recursos en programas de mantenimiento o planes maestros para la renovación de espacios museales. Los museos que la han integrado han sido producto de inquietudes presentadas por los equipos a cargo del proyecto.
Las soluciones como sanitarios ecológicos, mantenimiento a tuberías y sistemas eléctricos para evitar fugas, son proyectos que han enfrentado reticencia por parte de la comunidad institucional o local, por ser considerados de poco impacto o soluciones de lujo.
La infraestructura ahorradora no es relevante para el personal, durante algunas entrevistas notamos que les resultaba difícil determinar si sus centros de trabajo contaban con este tipo de elementos.
Es importante señalar que los inmuebles históricos (donde se encuentran ubicados una gran parte de los museos en nuestro país), presentan restricciones en cuanto a las intervenciones que se pueden generar dentro de ellos y los proyectos deben ser realizados por personal especializado. Es por esto, que muchos de estos procesos recaen en coordinaciones externas; para su diseño y en empresas licitadas para su realización, dificultando y limitando la toma de decisiones por parte del propio museo.
Reflexiones finales
Los hallazgos compartidos en este texto son resultado de un análisis parcial, ya que el estudio todavía se encuentra en proceso, lo que aquí se expresa sólo corresponde a los recursos y entrevistas analizados hasta el momento, se trata de resultados preliminares.
Respecto a los museos mexicanos nos parece que las acciones climáticas todavía se encuentran poco trabajadas dentro de las labores sustanciales, pero también dentro de la oferta a los visitantes.
Nos parece importante integrar a la conversación museológica, ejercicios, acciones y soluciones que contribuyan a que los museos se conviertan en embajadores de la cruzada por el clima. Principalmente porque es una crisis que afecta e impacta directamente a todos.
En el entorno institucional, las instancias dedicadas al cuidado del patrimonio deben integrar políticas y líneas de trabajo donde la acción climática sea una prioridad.
Agradecemos al V Coloquio Diseño Sustentable e Innovación Social, a los patrocinadores y a las autoridades que participaron en la organización de este evento por permitirnos compartir nuestras inquietudes y resultados. Creemos que la emergencia climática solo se puede enfrentar con un trabajo en conjunto, integrando a todos los actores posibles. Alcanzaremos resultados positivos si todos nos involucramos en la búsqueda de soluciones, consumos responsables y nos formamos como ciudadanos conscientes, en todas estas tareas las aportaciones que pueden generar los museos y sus comunidades son fundamentales.
Bibliografía:
Carla Padró, Museología Crítica y Arte Contemporáneo (Zaragoza: Prensas Universitarias de Zaragoza, 2003).
https://www.un.org
[1] Heurística Estudio está conformado por un equipo transdisciplinario de profesionales dedicados a la divulgación de la cultura, el arte y la ciencia. Desarrollamos actividades culturales y brindamos asesoría para su planeación, diseño y evaluación. http://heuristicaestudio.com/
[2] Carla Padró, Museología Crítica y Arte Contemporáneo (Zaragoza: Prensas Universitarias de Zaragoza, 2003), 52.
[3] https://icom.museum/es/recursos/normas-y-directrices/definicion-del-museo/
[4] https://icom.museum/es/news/el-icom-anuncia-la-definicion-alternativa-del-museo-que-se-sometera-a-votacion/
[5] https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-sostenible/
[6] https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-sostenible/
[7] https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/sustainable-consumption-production/
[8] https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/climate-change-2/
[9] Con base en el testimonio de 25 trabajadores de museos.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional